Este miércoles, Castro Molina había sido presentado en audiencias preliminares, donde la Fiscalía reveló su presunta implicación en el crimen de la mujer de 57 años. Adolfo Niebles Torres, fiscal de Alertas Tempranas y de Homicidios, hizo hincapié en el testimonio de un tío del capturado y el de un individuo conocido con el alias de “Poncho”. Ambos relatos dieron cuenta de las actividades de Castro Molina y de la forma en que se llevaría a cabo el robo en la vivienda en que laboraba la víctima.
No obstante, Edgar Bonilla Polo, juez Tercero Municipal, adujo este jueves que solo se contaba con información de fuente humana en contra de Castro Molina, razón por la cual se abstuvo de dictarle medida de aseguramiento, decisión que sin embargo no exime al joven de 24 años de continuar vinculado al proceso por el crimen ocurrido el pasado viernes 5 de julio. Según el juez, los dos testimonios obtenidos no eran suficientes para definir la implicación del dueño de la maleta de Rappi, que sigue imputado por los delitos de homicidio en circunstancias de agravación punitiva, fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones en circunstancias de agravación punitiva y hurto calificado agravado en la modalidad tentada como partícipe en el grado de cómplice.
La Fiscalía continúa la búsqueda del hombre que le disparó a Angélica María Ruiz Vega en la entrada de la vivienda ubicada en la carrera 75 con calle 86. El homicida, haciéndose pasar por un mensajero de Rappi, engañó a la empleada doméstica, quien le abrió la reja de la casa y, al percatarse de que trataba de un robo, forcejeó con él unos segundos. Durante la pugna, el hombre sacó un arma de fuego y le disparó en el abdomen. Angélica María Ruiz Vega falleció momentos más tarde en el hospital Niño Jesús.