Contaminación atmosférica.
Jader Osuna Navarro, ingeniero ambiental y miembro del Proyecto de Vigilancia de la Calidad del Aire del Establecimiento Público Ambiental (EPA), indicó para El Universal que es poco probable que Cartagena llegue al mismo grado de contaminación atmosférica de las regiones montañosas del país.
Para verificar si Cartagena cumple con estos estándares, el EPA cuenta con seis estaciones equipadas con monitores de calidad del aire. Tres de estos son automáticos y están ubicados en la Base Naval, la Zona Franca y La Candelaria. Los demás son semiautomáticos y se encuentran en La Bocana, Cardique y la estación de policía de la Virgen y Turística, en el barrio Olaya. Estos monitores miden la concentración de PM2,5, PM10 y ozono, otro material nocivo para el ambiente y la salud.
A futuro, se hará necesario conseguir equipos completamente automáticos y que monitoreen otras sustancias contaminantes como el monóxido de carbono y el dióxido de azufre.
¿Qué ha causado esta mejora?
La empresa Transcaribe no sólo mejoró el tiempo y las condiciones de transporte de los cartageneros, sino también se destacó por ser el ejemplo de las demás empresas de transporte y trazar el camino hacia el desarrollo sostenible al disminuir las afectaciones al medio ambiente, a la salud pública y reducir costos.
En lugar de los vehículos del Transporte Público Colectivo (TPC), se encuentran 282 buses que hacen parte de la flota de Transcaribe, entre articulados, busetones y padrones, que además de funcionar a gasolina, por su antigüedad generaban hasta 40 veces más agentes contaminantes. Esta mejora será más significativa cuando el masivo llegue al 100 % de su implementación, con 658 buses que reemplazarán a la mayoría de los vehículos del TPC.
Las alcaldías de Montería y Sincelejo trabajan para replicar la estrategia de Cartagena en sus sistemas de transporte, según afirmó Santiago Mejía Medina, gerente de Surtigas. Además, en Cartagena, empresas de transporte de carga han incorporado tractocamiones con motores originales a gas natural.
Mejía también destacó que entre los beneficios del uso del GNV está el ahorro de combustible que es del 45% en comparación con la gasolina y del 30% frente al diésel; y la reducción cercana al 100% del material particulado, que es uno de los contaminantes más perjudiciales para la salud.