Así es, una de las sagas de películas infantiles de Pixar más recordadas, llegó a los cines del mundo para continuar con la vida de los juguetes vivientes más valientes, divertidos y leales.
Esta historia inició en 1995, cuando la manada de juguetes miraba con preocupación los regalos de cumpleaños de Andy, un niño de 6 años, su dueño. Todo parecía estar bajo control, pero de repente un obsequio sorpresa: Buzz Lighyear, un juguete moderno que representaba a un astronauta, aturdió el ambiente. Este robó la atención de todos y claro, más la de Andy, eso hizo que el favorito, el vaquero Woody, le diera envidia. Esas diferencias quedan a un lado cuando el vaquero y el astronauta se pierden y deben trabajar en equipo para volver con su dueño.
Cuatro años después del éxito de la primera película, se estrenó la segunda parte. En esa ocasión Andy fue a acampar y dejó a los juguetes solos. Su madre aprovechó la oportunidad para sacar algunas cosas viejas que habían en el hogar e hizo una venta de jardín, todo iba bien, hasta que Woody cayó en medio de eso y un coleccionista lo atrapó para venderlo por una suma jugosa. De inmediato, los otros juguetes, dirigidos por Buzz Lighyear, emprendieron el rescate del vaquero y lograron estar a tiempo para recibir a Andy.
En 2010, Toy Story 3 mostró una situación que a muchos les parece dura y a otros algo normal. ¿Qué pasa con los juguetes cuando los dueños se van a la universidad?, la mamá de Andy sugirió donarlos a una guardería, sin pensar en el daño que los “malvados” niños le harían a lo que marcó la vida de su hijo. En ese momento, los juguetes lucharon por mantenerse juntos y a salvo, hasta que su dueño decidió dárselos a una linda niña: Bonnie.
Pasaron 9 años, quienes crecieron viendo esta saga ya están grandes, pero la intriga de saber cómo continúa la historia los llama. Y adivinen, sucedió lo imposible. Un tenedor-cuchara, otros utensilios y un poco de goma bastaron para que Bonnie le diera vida a un nuevo juguete. Los demás lo recibieron con ánimo, aunque este asustadizo amiguito hará que Woody y él se alejen del resto… ¿qué sucederá?
Como dice la canción característica de Toy Story: “Y si un día, tú te encuentras lejos, muy lejos de tu lindo hogar, cierra los ojos y recuerda que…yo soy tu amigo fiel, sí yo soy tu amigo fiel.” Aunque estén lejos, la manada siempre irá a buscarlos.